En los países escandinavos existen varios tipos de leches. Una de ellas mantiene una estrecha relación con una especie de carnívoras.

Se trata de la taetmjolk. Una leche fermentada con ph 4,4, lo que significa que es medianamente ácida. Uno de los valores más importantes de esta leche es su vida útil, que puede prolongarse durante varias semanas a bajas temperaturas. No es necesario que se prepare a la manera del yogurt o el kefir (cada par de días).

Según la tradición, este tipo de leches se obtiene cuando se adicionan hojas de Pinguicula vulgaris y Drosera spp. O bien, cuando las vacas de las que se obtiene la leche se alimentan de estas plantas.

Se dice que Lineo, durante un viaje a Laponia conoció este lácteo y documentó su experiencia, no sólo poniendo atención a su proceso de preparación, sino que también puso especial atención en la desecación de esta leche, pues también se usaba como levadura y esta era una forma de aprovechar el producto al máximo.

Actualmente existen varios estudios que abordan la aplicación y usos de esta planta en la elaboración de lo que los escandinavos llaman «leche larga», además de múltiples pruebas científicas que indican cómo usar estas plantas en la elaboración de lácteos fermentados.

Revisar fuentes: http://cybertesis.uach.cl/tesis/uach/2004/far173r/pdf/far173r.pdf 

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